os céus nublados
sempre me interessaram pela semântica que arrastam…
com estes apontamentos
frios apenas rasgo o silêncio das horas. de todas as horas. a torre sugere-me
uma qualquer sentinela atenta ali quedada desde sempre. depois aquela língua de verde que surge antes do horizonte
não é tão firme quanto qualquer pedaço de terra deve ser. flutua na indecisão a
qual dos mundos deve pertencer se ao etéreo, solto e leve ou se ao pesado e de
firmes ancoras, terreno. nesse embalo fico eu a duvidar se de facto vi o que
registei ou se apenas registei o que senti…
Los mismos paisajes con distintas formas de verlos. Se conocen pero vemos en ellos ecos de ciudades orientales en que vive Sherezade o aldeas nevadas en que Chagall pasa su infancia. Si pinto lo mismo en otro formato veo un pueblito alentejano en que entre un gran cielo y un gran suelo la vida se desarrolla en una pequeña franja. Otras veces vemos en ellos fortalezas medievales castellanas. Pero siempre vemos a Victo, Vemos quien se pasea y sale de la villa y tiene ojos para ver la luna, el cielo y el suelo y tiene de sobras la habilidad y la gracia (de estas anda sobrado) para contárnoslo. Un abrazo Victo!
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